A mi la lluvia, no me inspira

Me puse las botas de lluvia para protegerme, de cara a la tormenta sin fin que persistía...

...a las 2 cuadras, las botas hicieron que me resbalara en el cordón, cayera de costado al piso y me mojara íntegramente todo mi lado izquierdo...

Le ecuación no cerró por ningún lado.

(M)

Extraño

algunas esquinas de ciudad
y las risas de mis amigas rebotando en el asfalto,

las superofertas de cafés y diarios,

mis trabajos y el otoño en las avenidas,

tener tiempo de fijarme en el olor rancio de un subte, en la soledad soliloquia de algunas gentes,

es tan extraño... tengo nostalgia de Buenos Aires...

(B)

Amar la trama

Somos
justo en la intersección difusa
que nace de la mezcla
entre lo que deberíamos ser, lo que queremos, lo que nos prometimos, lo que sentimos y lo que ven los demás...

(M)

Sin antiparras

Hoy tengo ganas de nadar
dentro mío

(M)

Alma de diamante

Conmocionada cuando escuché la noticia, atiné a susurrar..."se murió Spinetta"..

"Pobre", dijo mi compañera de combi y volvió a sus auriculares.

Pobres nosotros que nos quedamos sin su magia...eso pensé yo, pobres nosotros...

(M)

Inseguro de vida

Todos los empleados tuvimos que rectificar nuestros datos para el seguro de vida obligatorio que da la empresa.

El trámite constó de 10 minutos de sermón del tipo del seguro explicándome "acá dice que el 50% podrá entregarse a quien designes en caso de enfermedad terminal" "el 60% podrá ser entregado en caso de accidente grave con discapacidad" y tooooda una hermosa secuencia de episodios felices que podrían sucederme y por los que mi madre y mi hermano cobrarían 24 sueldos míos...dependiendo la gravedad del asunto, claro.

Los 10 minutos fijé la mirada y en mi mente lalalalalaaaaaaa decime donde firmo y listoooo. Ahorrame la data que no quiero ni pensarla!!!

(M)

Los muchachos del tablón...

Por que me pareció piola...y lo comparto... Tablón de anuncios

(M)

No prenderla nunca más, esa es la solución.

El otro día prendí una tele a las 7 de la tarde, después de muchísimo tiempo sintonicé un programa vespertino en una casa ajena.

Con estupor y fobia me di cuenta de cómo gritan en la televisión.

Ey ey ey ¡estoy acá! de este lado de la caja boba, tengo el volumen normal, ¿Por qué me gritás? ¿POR QUÉ?

5 minutos, pude tolerarlo tan sólo 5 minutos.

(M)

Puaj

...y cuando te vi ahí parado en los pasillos de la oficina, escribiendo en tu blackberry del que no podés separarte un segundo, levantar un poco la vista y gritarnos, con esa sonrisa de cotillón barato, "por la plata baila el mono"...me dieron ganas de vomitar.

Vomitarte caras de culo y gritos que retumben en tu micro cerebro: "no entendiste nada".

(M)