viernes, 3 de mayo de 2013

Automatizada

Hay cosas que me embolan. Me dan como una cosita en el pecho.. ah! si! ya lo tengo: HARTAZGO.

Estoy harta de cosas que me tienen harta y que no puedo gritar porque peco de una mala educación extrema, digna del espanto entonces, no dejo de hacerlas. Mientras por dentro algo, muy chiquito pero algo al fin, se me marchita.

Me harta, me hartan inevitablemente desde que tengo memoria pero sigo, como caballo obediente, sin rebelarme a los gritos...

- El "salud" cuando estornudo o "buen provecho" si me ven comiendo. ¿Qué buscan deseándome "buen provecho" que te eructe en la cara? ¿Me estás deseando buena digestión? ¿No te parece demasiado? ¿Por qué tengo que decir "gracias, igualmente"? Si no lo hago soy una insolente

- Saludar con beso de mejilla, uno por uno, toooodos los días de la semana a gente que veo 9 horas por día. ¡Pasamos muy poco tiempo sin vernos, no nos saludemos!

- El "como vaaaa?", así, dicho en movimiento con ningún interés y sin siquiera tiempo de recibir una respuesta.

- Los movimientos de cabeza repitiendo el infinito "como va?" que dura todo el día. Lo repite cada vez que te cruzas en pasillo, escalera o baño con tus compañeros de trabajo

- Las caras de sonrisa falsa dibujada para el jefe

- Las expresiones faciales que denotan el mayor interés posible (falso como el unicornio) sobre lo que se está tratando en la reunión laboral

Me molesta. Me enerva (cuánto hacía que no usaba esa palabra). Me incomoda.

(M)