Cumplir años y que caiga día de semana no es lo más conveniente.
Tener que enfrentar la institución social que implica en un encierro oficinesco, mucho menos.
Algo sucede: sobran algunas cosas y faltan otras.
Sobran:
* Caras de póker a gente ignota que viene a saludarte porque vio el mail de recursos inhumanos que informa toooodos los cumpleaños semanalmente
* Sonrisa impostada ante el "¿
Cuántos?" "
2*" "
ah re bien" "
si si" y ante algún que otro inoportuno cántico característico
* Palabras, preguntas y falsos abrazos
Faltan:
* Que se decrete por ley que el día de cumpleaños es asueto
* Regalo obligado que la empresa debería hacer
* Ubicación
Y que los cumplas feliiiiiiz
(M)