Por las dudas, ya tengo elegido un superpoder. No sea cosa que me agarre desprevenida un hada madrina, me quiera dar uno rápido, rápido y yo no tenga nada entre manos.
El silencio. Ese sería mi superpoder: si miro fijo fijo fijo a quien quiero que se calle, automáticamente el ser en cuestión sigue hablando pero en mute. El no siente nada, el se escucha y sigue su blablabla como si nada pero a mi, a mi sí que me cambia todo.
No me pierdo de nada. Es como una novela de Andrea del Boca que si ves el capítulo 100 entendes todo sin tener que fumarte los 99 anteriores. Igual. Igualito. Hablar sin decir nada, ese parece el superpoder de muchos. Yo quiero el que los anula y me deja en paz, en mi mundo.
(M)
El silencio. Ese sería mi superpoder: si miro fijo fijo fijo a quien quiero que se calle, automáticamente el ser en cuestión sigue hablando pero en mute. El no siente nada, el se escucha y sigue su blablabla como si nada pero a mi, a mi sí que me cambia todo.
No me pierdo de nada. Es como una novela de Andrea del Boca que si ves el capítulo 100 entendes todo sin tener que fumarte los 99 anteriores. Igual. Igualito. Hablar sin decir nada, ese parece el superpoder de muchos. Yo quiero el que los anula y me deja en paz, en mi mundo.
(M)
Woa, acabás de compartir un descubrimiento importante che.
ResponderEliminarLa humanidad no será igual después de esto.
¡salú!
Lucía
PD: Me tomo la libertad de usar tu deseo si alguna vez me cruzo con un genio o un hada madrina o un duende zapatero que esté de buenas...
Obvio Lucia! Compartamos el deseo! y que viva el silencio de algunos!
ResponderEliminar(M)