Con B de bizarro, botánico y bonito...

El Botánico es uno de esos lugares más que oportunos para hacer tiempo (entre otras cosas). Te sobran 40 minutos antes de irte a trabajar, el clima es ideal y merodeas el botánico: bingo! espera perfecta en la que seguramente tenés algo que reflexionar. Eso me pasó hoy...disfrutaba del pulmón verde palermitano cuando casi de sopetón tenía sentada al lado mío una viejita, claramente interesada en mí como interlocutora. Peinaba unos hermosos 92 años y una vitalidad envidiable.
Al contrario de lo que me pasa con los taxistas, cuando una viejita quiere darme charla accedo sonriente.
La seguidilla de consejos y enseñanzas de vida que esta señora me dio en esos 15 minutos SIN CONOCERME me dejaron más que sorprendida...atónita...
"Vos no te tenés que quedar eh? siempre en movimiento...en la vida uno nunca deja de aprender cosas...nunca..pero no hay que quedarse, no no...hay que estar siempre en movimiento..aparte sino lo único que crece es la panza y el culo (acá ya dude si la señora estaba hablándome con demasiada alusión personal, pero no...lo desestimé de inmediato). La vida se la hace uno...y es como te la tomás (literal..y dudo que haya simplemente reproducido el slongan de sprite)"
Le pregunté como se llamaba, claro
"Y qué importa?...si yo te puedo decir Natalia pero que importa...en un rato ni vos ni yo nos acordamos de eso..de lo que hablamos probablemente si pero que importan los nombres"
Quise darle un gran beso antes de irme...no lo hice...pero le regalé mi sonrisa más sincera de las últimas semanas...

(M)