domingo, 25 de abril de 2010

Confieso

Confieso mi último descubrimiento: soy obsesiva. No sé todavía si en un grado inmune para los demás, o si en cambio, el nivel de mi obsesión es alto como para molestar bastante.
¿Cómo lo descubrí? Mirá:

- Me rompe soberanamente que en situación de movida multitudinaria de un lugar a otro, la persona que maneja ni nadie en el grupo tiene la más p... idea hacia dónde hay que ir. Entonces se pierden medias horas enteras llamando, preguntando, mirando cartelitos de las calles, buscando el destino. Yo antes de ir a algún lugar que no conozco, y más si manejo ¡me fijo en la GuíaT!

- Me pone nerviosa una pava con agua hirviendo haciendo ruidito. ¿Nadie apaga la hornalla? La apago yo.

- Las zapatillas repletas de cables, baterías y cargadores de celular que del otro lado del cable no tienen nada conectado. Los desenchufo a todos y apago la zapatilla.

- Me sacan de quicio las luces prendidas sin que haya nadie en el lugar.

- Estar en una reunión en la que se habla, por ejemplo, de una película. En determinado momento el interlocutor quiere decir el nombre de una actriz. Nadie se acuerda. Yo digo el nombre una, dos, tres ¡ocho veces! Pero nadie me escucha. Hasta que a uno se le cruza el bendito nombre de la actriz por la cabeza y lo grita afanándose el título de "conocedor experto de cine" que me correspondía. (Bueno, eso no sé si es obsesión o será que en algunos momentos me hago invisible)

- No puedo irme a dormir con la cama destendida. Y si tengo almohadones en la cama, jamás los uso de almohada, porque para eso están, precisamente, las almohadas.

- Quiero pagar las cuentas antes del vencimiento.

- Si voy a viajar en colectivo, saco las monedas (justas) antes de salir y me las guardo en un bolsillo al alcance de la mano. Y claro, más de una vez la maquinola me traga la monedita y me morfo el engorroso trámite de buscar la billetera en la cartera, las caras de or... de los que esperan atrás, la del chofer, etc.

- Le contesto a la radio. Me indigno con las faltas de ortografía de los diarios. Cuando en la tele alguien no se da cuenta de que precisamente, las cámaras, hacen la televisión creo en la telepatía y canturreo: "chiiiiicos miren a la cáaaaaaaaamara que para eso les pagaaaaaaaaaaaaan!"

(B)

2 comentarios:

  1. Comparto algunas de tus obsesiones, a saber:
    La pava hirviendo, luces prendidas sin que haya nadie, le contesto a la radio/televisión y saco las monedas antes de viajar pero si la maquina me dice que falta una moneda no le creo y hago anular el boleto, pongo las mismas monedas y resulta que no faltaba ninguna! Estoy casi seguro que hay una "avivada" para currar monedas cada "X" cantidad de pasajeros.
    Bueno yo agrego un par de obsesiones mías:
    -Cualquier nivel de volumen tiene que estar en numero par. Soy capaz de levantarme o pedirle a alguien que suba uno o baje uno para llegar al par. He llegado a pedirle a taxistas que lo
    cambien
    -Antes de salir de casa chequeo y re chequeo que el calefon apagado, los placares cerrados, la tele apagada a full (esto es botón de power del mismísimo aparato), persianas cerrado, canillas del baño cerradas, puertas de la heladera bien cerradas... y alguna cosa me estoy olvidando. Esto es siempre, incluso si voy al chino y vuelvo en 10 minutos.
    -Una obsesión casi superada: chequear las varias promociones de las tarjetas que tengo antes de ir a comprar algo, a ver si todavía perdía algún descuento!
    -Tengo un pincel para pintar empanadas porque creo y debo tener una herramienta para cada necesidad especifica... en este caso empanadas doradas.
    -Mi rutina de paginas de internet: todos los días entro sistemáticamente a las mismas paginas en el mismo orden.

    y si lo pensara mas detenidamente me encontraria 25 obsesiones mas... lo voy a hacer, pero basta de escribir.

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  2. ¡uaaa! ¡vos estás peor que yo calabacito! gracias por tu comentario
    Un beso (pero siempre en el cachete izquierdo, jua)

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